Apelar a la amnesia colectiva es una apuesta arriesgada, más cuando se quiere probar que tan corta es nuestra memoria y que tan peligroso puede ser que recordemos para algunos. Y es que en la era de la información solo hacen falta unos pocos golpes del teclado para descargar lo que no podemos recordar refrescando oportunamente nuestra memoria. ¿Quien no puede recordar el principal argumento utilizado para aumentar astronómicamente el precio de los alimentos? Fue el alza del precio del petróleo.
En aquellos instantes de la historia en la moderna patria boba, fue como el sonar del disparo de salida en una carrera a ver quien lograba aumentar más los precios antes de que los ingenuos consumidores se dieran cuenta de la especulación sanguinaria. Y les fue bien, muy bien, ninguna cadena de supermercados quebró, gracias a la oportuna intervención de los dueños que subieron los precios para soportar el alza del petróleo, cosa que no fue equitativa con los salarios de los trabajadores que siguieron iguales y estos si tuvieron que tomar medidas como el comer menos.
Ahora, alguien con algún nombre que no puedo recordar dijo que la culpa de la comida tan cara la tiene el gobierno y es porque la luz es demasiado cara y no se incentiva a los productores. Por más que he buscado no encuentro relación de esto con lo que ocasionó el alza de los precios, ni en Wikipedia hay algún rastro. También se menciona que para bajar la comida hay que bajar la luz.
Para entender el concepto económico que ocasiono el fenómeno del alza de los precios se tendría que ser un erudito, como los que hundieron a los gringos en la más oscura crisis y que tampoco han podido desarrollar una formula para distribuir la riqueza entre aquellos que la generan. Es más fácil entender las conclusiones de la sabiduría popular.
Si se baja la luz eso favorece al comerciante bajando sus costos de operación. Al bajar sus costos de operación el margen de ganancia aumenta y talvez pueden rebajarnos unos centavitos sin ceder ni un ápice sus márgenes de ganancia. Aunque esta no fue la misma formula que utilizaron para subir los precios. La excusa fue el petróleo pero ahora que esta por el suelo hay que bajar la luz y tomar toda clase de medidas como incentivar al productor para que produzca mas barato y los supermercados compren mas barato revendiendo los productos a precios que no afecte sus ganancias.
En la economía solo hay una regla clara. El empresario no asumirá costos que disminuyan sus ganancias, los trasladará al consumidor y después cambiara las reglas del juego. Afortunadamente con algunos clics encontramos información que sin ser eruditos nos ayudan a entender y refrescar la memoria.