12-05-2008 Por: Gabriel J. Perea R. @elistmopty
El d
eporte favorito de todos los panameños es criticar de todo en cuanto al conocimiento humano se refiera, y como algo muy nuestro siempre tenemos la razón y conocemos mejor que los demás cómo se deben hacer las cosas. Confieso que en alguna medida, como buen panameño, lo practico habitualmente, pero de vez en cuando hay que ser positivos y además de críticas brindar algunos buenos y sesudos consejos, principalmente con aquellos que talvez en algún momento no concordábamos.

En este caso y como lo que está efervescente es lo político, me permito remitirle algunos consejos a un Bimbín con toda sinceridad y el respeto que se merece. Inicialmente debemos reconocerle que tiene verdadera capacidad de guerrero al emprender una campaña de pre candidatura presidencial de tal envergadura, aunque esta no lo llevase a lograr consolidarse como el preferido de su partido.
Después de aquella batalla, que llegó a ribetes casi de enfrentamiento en trincheras con sus posteriores escaramuzas, nadie hubiese imaginado que saldría en un solo pedazo y con ganas de seguir dando de qué hacer, muy característico de un Bimbín con corazón de águila Arpía, y así fue, demostró que no salió despluma’ó y que no había presa pa’l sancocho.
Sea por las razones que fuera, de las que algunos inclusive amenazan con hacerse el harakiri de ser ciertas, se plegó a su partido y aceptó ser el vice, acción que todos daban por descontado. Con esto ahora, hay un nuevo panorama político que recién comienza y que trasciende este próximo periodo presidencial. Por tanto, Bimbín escucha estos consejos, algunos provenientes del bejuco electrónico desde el interior del país.
Humildad ante todo, no estás acabado, es de gigantes reconocer la derrota, aprender de los errores y planear nuevas estrategias. Siempre tener presente que hay vida más allá del 2014 y que cada acción de hoy repercutirá mañana. Recordar que existe un gran número de copartidarios del PRD y de independientes que creían y todavía creen en tu futuro político. Cuídate de las encuestas de supermercado, caen mal en el estómago. No equivoques el personaje figurando innecesariamente, recuerda que tu momento llegará. Demuestra disciplina e inculca respeto y compromiso con principios, no con circunstancias.
Debes decir lo que tengas que decir de la forma correcta, en el momento correcto, no te dejes llevar por ráfagas de viento, porque las palabras llevadas por el viento te pueden regresar pegajosas. Además, aléjate de los que comienzan a tener malos olores, eso es preludio de que algo ya está próximo a su fecha de vencimiento. Sobre todo, asegúrate de que cuando salgas del despacho todo quede en regla, las cuentas claras, con auditoría en mano y ante la vista del público.
Y sobre todo… ten paciencia, solo son cinco años en segundo plano.