El candente sol Istmeño siempre nos revela hechos sorprendentes. Y hoy era uno de esos días con un sol tan despiadadamente abrasador que hasta las iguanas no querían salir a la calle, solo era cuestión de esperar a que algo pasará producto de las alucinaciones que la desaparición de la capa de ozono ocasiona en las personas. Y fue así.
Hoy a pleno sol, en esta angosta parcela donde los mangotines hacen de las suyas impunemente, donde los gallotes se visten de ejecutivos, en la capital de las diabluras, poncheras y demás extravagancias, se difundió la noticia sobre la existencia de un desconocido ministerio para el desarrollo sexual.
Resulta que El Ministerio de Desarrollo Social y demás hierbas aromáticas, el cual se creía era una entidad encargada de garantizar que la singular especie istmeña no propiciara su propia extinción, en realidad se estaba dedicando a funciones muchos más provechosas para elevar el nivel de vida de los atribulados ciudadanos.
Según declara una ex-funcionaria de dicha institución, los malos tratos, insultos y toda clase de improperios son conductas habituales a las cuales están siendo sometidas diariamente el personal femenino. Añade que la actitud de una alta funcionaria ocasionó que popularmente la institución se conozca como el Ministerio de Desarrollo Sexual. Este nuevo enfoque del ministerio es impulsado por la alta funcionaria que se rumora esta afectada por problemas atmosféricos ocasionados probablemente por la contaminación ambiental. La conducta de la calenturienta provocó que la valiente funcionaria indignada tomara la irrevocable decisión de renunciar. Decisión que será solidariamente emulada por algunas de sus compañeras ante el temor de manchar su intachable reputación y ante la amenaza por parte de la alta funcionaria de tomar medidas disciplinarias con sus propias manos, incluyendo enfrentamientos cuerpo a cuerpo, si no se acataban sus incuestionables órdenes.
Paréntesis….La funcionaria renunció, conducta sumamente extraña y sin precedentes entre los funcionarios Istmeños los cuales se caracterizan por una extraña característica que se manifiesta cuando se accede a un cargo, con un obsceno salario dentro de las altas esferas gubernamentales. Esta afección, que solo afecta a los encumbrados, ocasiona el desarrollar un pellejo bien grueso, casi impenetrable, impermeable y con poderes camaleónicos lo que los convierten en ciudadanos invulnerables a las encuestas desfavorables, delitos, críticas, culpabilidad manifiesta, cargos de conciencia o el insomnio post delitos. Tampoco se conocen precedentes en otros tipos de funcionarios, en los cuales la renuncia es una acción impensable, en tales casos al funcionario se le renuncia.
La actual titular del Ministerio aduce desconocer que estas prácticas estuvieran ocurriendo dentro de la institución e indignada manifestó su incomodidad por la calumniosa noticia. La ex -funcionaria desmintió la versión de la Ministra declarando que había notificado en extensas notas lo que estaba aconteciendo con pelos y detalles. Sin embargo parece que las misivas fueron enviadas por el camino que en los tiempos de la conquista española era conocido como camino de cruces y se efectuaba a golpe de mula.
Se espera que de comprobarse las denuncias de las afectadas el Ministerio sea declarado Autoridad para el Desarrollo Sexual. Practica común del gobierno Istmeño al declarar a las instituciones Autoridades para que los ciudadanos acaten de alguna forma los dictámenes de las rebautizadas. No se conoció los detalles de los nuevos tipos de servicios que son ofrecidos en el Ministerio, ni que tipo de característica tiene que poseer el personal para poder laborar en la singular institución.
Nota aclaratoria: Las hiervas aromáticas se refiere al combate contra la incontrolable practica sexual con irresponsables fines reproductivos, la reorientación de practicas sexuales con exclusivos fines recreativos, la proliferación de hijos y la prevención de conductas que desarrollen políticos corruptos entre otras actividades exóticas.
El Ministerio de Desarrollo Sexual (MinSex)
Por: Gabriel J. Perea R. @elistmopty